En el marco de esta Pandemia que azotó al mundo y en especial al sector del turismo, algunas aerolíneas y programas de millas se mostraron muy activos en cuanto a promociones y ofertas en compras de pasajes aéreos o millas. Pero todo tiene un porqué y todo tiene su lado B.
Por esa razón es que nace este post, porque ninguno nació millero, y porque los que recién ingresan a este mundo deben entender que los programas de fidelidad de las aerolíneas ofrecen oportunidades pero también características que hay que conocer de antemano, para poder saber cómo aprovechar lo que nos ofrecen.
Las Millas no se Guardan, Se Gastan

Desde Marzo, cuando comenzó la cuarentena y hablar de viajes era casi pecaminoso, las emisiones de vuelos cayeron a un mínimo histórico, casi nulo, y las diversas compañías, conscientes de que viajar en un corto plazo iba a ser absolutamente imposible, comenzaron a ofrecer productos súper flexibles, o bien la opción de acumular millas a futuro con el fin de emitir viajes para 2021 (porque antes de eso se antoja muy complejo el viajar). Y yace aquí la trampa, en cuanto a los programas de milla se refieren.
Los que siguen el blog, se habrán dado cuenta de que he posteado muchas promociones de Smiles, en un accionar comercial muy intenso y que brindó oportunidades varias de comprar millas a un muy bajo precio. Muchas de ellas son oportunidades para aprovechar si realmente querés viajar en 2021. Si no es así, el juntar por juntar te puede dar un disgusto.

Smiles Argentina es un programa de millas que vende millas en ARS, una moneda que a la hora de la instalación del programa en nuestro país tenía una paridad de 1 USD=45 ARS, o incluso menos. Al día de hoy, con el 30% del impuesto PAIS y devaluaciones, hablamos de una equivalencia de 1 USD=95 ARS, por lo que no es difícil ver dónde está el problema.
En este contexto, Smiles decidió no devaluar su moneda, costando lo mismo que antes (y con las promociones incluso menos), pero eso lleva entonces a otra consecuencia inevitable: la suba en los precios de los canjes. Alitalia pasó primero de 25 mil millas a 39800, y esta semana a 44 mil. Qatar a Doha pasó de 45 mil a 64 mil y más recientemente a 73 mil. Y los ejemplos siguen. En un contexto cambiario tan volátil como el que atraviesa nuestro país desde hace un tiempo, pedir que las millas cuesten lo mismo, y que los valores de los canjes queden congelados, es demasiado ingenuo, por decirlo de alguna manera. Y el que crea que estos valores que te nombré son finales, es muy optimista. Los valores van a seguir subiendo. Es inevitable. En este marco es que se hace imperioso recordar entonces la máxima primera de todos los programas de fidelidad de las aerolíneas: Las Millas no se Guardan, Se Gastan.

Las millas son plausibles de devaluación en cualquier momento, por lo que guardarlas, más en un contexto como el argentino y en un programa que funciona en pesos, va a servir sólo para ver cómo con el paso tiempo van a ir perdiendo su valor. Por lo que cuando ves la oportunidad la aprovechás y las canjeás. Máxime, cuando como en el caso de Smiles, tenés el excelente producto de Viaje Fácil, que te permite reservar el pasaje, congelando el precio para poder pagar con millas hasta 2 meses antes del viaje. Si no estás del todo seguro, por 750 ARS podés hacer una reserva congelando el valor y aprovechando las millas que tenés hasta el momento, o bien, darte margen para obtenerlas a través de cualquiera de las promociones.
El COVID y las Aerolíneas: ¿En cuál confío?

Pero como si los vericuetos de un programa de millas fueran pocos, el mundo aeronáutico atraviesa hoy una crisis sin precedentes, y muchas de sus estrategias a futuro se relacionan con la necesidad de hacer caja para afrontar gastos del presente y «después vemos». La venta de millas de LATAM Argentina es un ejemplo de lo peor que puede pasar en este contexto: te vendo el producto a un precio super atractivo, hago caja y después desaparezco. ¿Se puede replicar esto en otras empresas? Puede que sí, puede que no.

De ninguna manera estoy diciendo que esto va a suceder con Smiles ni mucho menos. A lo que me refiero es que hay que ser inteligentes y selectivos a la hora de emitir un vuelo a futuro en cuanto a la selección de la empresa en la cual viajar. Por ejemplo, siguiendo con Smiles, el programa ofrece pasajes con varias aerolíneas con fuerte presencia estatal o que recibieron fuertes ayudas de sus respectivos países, por lo que nada hace pensar que su existencia estuviese en riesgo: Qatar Airways y Emirates son aerolíneas cuyas solvencias y estados protectores las blindan ante esta crisis; algo diferente sucede con Alitalia, la eterna línea aérea italiana que sobrevive a toda crisis existente y que recientemente fue reestatizada, algo similar a lo que ocurrió con la portuguesa TAP. Por otra parte, KLM y Air France recibieron fuertes salvatajes de los gobiernos franceses y holandeses, garantizando su funcionamiento. Y en el caso de American Airlines, recibió, al igual que sus rivales Delta y United, una importantísima ayuda del gobierno estadounidense.

Más allá de Smiles, sea cual fuere el programa en el que estés inscripto, hay que estar atentos a las novedades del mundo de la aviación. Algunas aerolíneas surgen como confiables ante esta crisis: Lufthansa, Austrian, Swiss Air; las que conforman IAG (British Airways, Iberia, Aer Lingus, Vueling), o los casos de Etihad, Air New Zealand, Qantas y Turkish, son algunos ejemplos de líneas aéreas en las que emitir no deberían suponer ningún riesgo. En el contexto latinoamericano, COPA aparece como la más solvente, y Aerolíneas Argentinas, por su característica de empresa estatal, no debería suponer riesgos. Distinto es el caso de cualquiera de las subsidiarias del grupo LATAM, o el caso de Avianca o Aeroméxico que presentaron sus bancarrotas en USA, cuyo futuro esta atado a muchísimos factores. No estoy diciendo que vayan a quebrar, pero su realidad es más compleja e incierta que la de otras.
La Gran Contra De Los Programas de Fidelidad: El Vacío Legal

Si hay una contra en los programas de millas es el vacío legal que existe a la hora de resolver problemas que surjan en su uso. Para graficarlo, expongo una situación particular que me sucedió en 2017. Via Smiles Brasil, yo emití un tramo de Alitalia desde Copenhague a Ezeiza con escala en Roma. Todo iba bien hasta que menos de un mes antes del viaje, ingreso a mi reserva y me doy con que el tramo de Copenhague a Roma fue cancelado porque Alitalia no volaba más ese tramo. Sabido esto, me comuniqué con Alitalia, quienes me dijeron que debía resolverlo con Smiles que es quien emitió el pasaje para que me ofrezcan una solución, y a su vez, desde el programa me dijeron que quien canceló el vuelo fue Alitalia, por lo que ellos me debían ofrecer esa respuesta. Tanto Alitalia como Smiles Brasil me ofrecieron como única alternativa cancelar el tramo de Copenhague a Roma y volar desde allí a Ezeiza, sin devolución de millas o compensación de otro tipo. ¿El resultado? Terminé comprando por mi parte un vuelo de SAS de Copenhague a Roma para no perder el vuelo de regreso a Argentina. Mas allá de reclamarles a cada uno por separado, mucho más no se podía hacer, ni quedaba claro a quien poder acudir.

¿Qué hubiese pasado si el pasaje hubiese sido comprado por Alitalia? Probablemente me hubiesen ofrecido, como sucedió con muchas personas en ese momento, un vuelo por cualquiera de las aerolíneas con las que estuviese asociada, ya sea KLM o Air France y llegar de alguna manera a Roma a tiempo, o bien, algún tipo de compensación. Hay un vacío legal respecto de los programas de fidelidad que no tiene que asustar, pero del cual hay que estar conscientes.
En Busca De La Oportunidad
En este blog, no me caso con ningún programa. La razón por la que publico tanto de Smiles es que, en el contexto de una economía y cambio derruidos, conviene y mucho, y porque, es hace años (en su momento Smiles Brasil), el programa que me permitió viajar y llegar a lugares que nunca creí posible. Lo hago desde ese convencimiento personal. Ahora, eso no quita que Smiles es dinámico en cuanto a sus precios de canjes y que los valores suban de un día para el otro (por eso siempre te digo que si encontrás algo que te convenga, uses el servicio de Viaje Fácil) y no quita que Smiles es una empresa que necesite ganar dinero y tome medidas para ello. Yo publicaré de Smiles siempre y cuando convenga al lector y a mí como viajero; pero cuando no convenga, se verá que pasa. Ahora conviene, pero nada te garantiza que lo hará a futuro. Es aprovechar el momento y la oportunidad del canje que te ofrezca.
Algo así sucedió con aquella promo loca de Iberia a través de la cual todos viajamos por Iberia y muchos juntaron Avíos para volar por las aerolíneas de IAG. En ese momento el programa fue hiper conveniente, sumado a los cupones de Groupon de 2 mil Avios por 19 Euros. pero una vez que pasó eso, desaparecieron esos Groupones, y dejó de ser tan interesante para el usuario argentino.
Conclusión:

Los programas de millas brindan enormes oportunidades pero requieren de quién quiera aprovecharlos mucha atención, perspicacia y sagacidad. Asimismo, nunca olvidar que cuando se encuentra una oportunidad, se la aprovecha, porque mañana puede no estar, y porque los precios pueden siempre variar, porque esa dinámica de valores forma parte de la esencia misma de muchos programas de millas.
Tiene sus pros y sus contras, pero es la verdad que son los programas de millas los que te permiten acceder a servicios y productos que con nuestro bolsillo cotizado en pesos de otra manera sería imposible. Bienvenido entonces a este fascinante mundo de millas, puntos y emisiones de vuelos impensados a destinos inimaginables por precios que podrás pagar. Eso sí te lo puedo prometer.
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