Teniendo en cuenta las promociones que hubieron en el primer semestre de 2023, no es difícil intuir que muchos usuarios de Smiles están viajando a Japón en algún punto de 2024. Uno de los mejores viajes de mi vida pero también de los más costosos, que en el contexto actual se hace aún más complejo en un aspecto: el alojamiento.
Japón es un país sin igual, para amarlo u odiarlo quizás, con distancias eternas, medios de transporte de otro planeta y alojamientos muy costosos. Al tema de los costos, hay que agregar que el otrora muy conveniente JR Pass, el pase para usar los trenes de alta velocidad o Shinkansen, incrementó notablemente su valor y que Airbnb funciona con muchas limitaciones. Por eso, a la hora de buscar un alojamiento, la cercanía a la Yamanote Line no sea tan imprescindible, aunque sí la cercanía a una estación de trenes o metro.
Kokuminshukusha Miyajima Morinoyado Hotel en Miyajima, Japón.
Cuando allá por 2017 armé mi periplo por Japón y Corea del Sur, me pasó que el fin de semana cuando iba a pernoctar en la idílica Miyajima, era fin de semana largo en Japón, y no había lugar disponible en ninguna plataforma de alojamientos habia y por haber. Y fue así que llegué a Japanican. Un universo paralelo de alojamientos de las tierras Niponas.
¿Cuál es el secreto de Japanican? Japanican posee un enorme stock de Ryokan, los alojamientos japoneses tradicionales cuyas habitaciones constan de una mesa con sillas bajas, y que a la hora de dormir se mueve y reemplaza con dos tatamis con su ropa de cama. También hay hoteles más occidentales, pero creo que se destaca por sus Ryokan. Una de las cosas que descubrí con Japanican, es que tiene un sinnúmero de hospedajes que no están en las agencias internacionales, algunos muy económicos, que si no llegás a esta página ni siquiera sabrías de su existencia.
Interior de Habitación Ryokan de Miyajima Morinoyado en Miyajima, Japón.
No tiene una mecánica muy compleja, es como cualquier otro sitio; lo que sí recuerdo, es que fue complicadísimo pagar: de hecho, autoricé todas mis tarjetas y aún así no podía hacer el pago, y la única con la que pude abonar fue mi American Express directa.
Mi Alojamiento en Miyajima
Uno de los pasos de la cena degustación incluida en el Miyajima Morinoyado Hotel.
Nosotros reservamos en el Kokuminshukusha Miyajima Morinoyado, un hotel que tenía opciones de habitación occidental o Ryokan, y elegimos esta última para experimentarlo, y contaba con una cena de degustación y un desayuno de similares características que fueron absoultamente memorables. Un hotel que no estaba en ninguna otra plataforma disponible.
Desayuno degustación incluido en la tarifa del Miyajima Morinoyado Hotel.
Lo curioso de la promoción, es que los pasajeros deberán postularse a fines de febrero para un destino sorpresa. Los vuelos saldrán y regresarán sólo a los aeropuertos de Tokio Haneda, Osaka Itami y Osaka Kansai.
¿Cómo funciona la promoción?
Primero que nada, deberás registrarte en el el programa de fidelidad de la aerolínea. JAL Mileage Bank, lo que podés hacer a través de esteenlace. Posteriormente, cuando a fines de febrero se abra la posibilidad para postularte a los vuelos, podrás ingresar a la Application Screen, donde podrás elegir día, horario, aeropuerto de salida, cantidad de viajeros y franja horaria.
A continuación, se te mostrarán 4 posibles destinos a los que podrías viajar. Si estás de acuerdo, ingresá los datos de los viajeros y postulate. Si no te gustan, podés buscar de nuevo y los destinos cambiarán. Recordá que al momento de postularte, tus datos deben ser exactos a los ingresados en el programa de fidelidad y que debés tener el vuelo a Japón ya adquirido, puesto que a la hora de postularte, te serán requeridos los datos del vuelo de entrada a Japón.
Una vez que te postulaste, en un plazo no mayor a 3 días recibirás un email de JAL diciéndote a que destino viajarás finalmente.
Tener en cuenta a la hora de postularte a la promoción.
Los requisitos para participar de la promoción, son ser miembros de JAL Mileage Bank, tener pasaje comprado a Japón y tener residencia fuera de Japón. Asimismo, habrá un límite máximo de postulaciones por día, como así también un límite en el número de búsquedas a realizar por día.
Conclusión:
Se trata de una promoción divertida, y que si estás en esas fechas en Japón, puede aliviarte y mucho el bolsillo teniendo en cuenta nuestro contexto económico y los astronómicos precios en Japón, máxime en temporada alta, potenciada por los juegos olímpicos. Gran oportunidad de ahorrarte muchos billetes, si viajas por esos lares en el Verano Boreal de 2020.
Japón es multifacética, con innumerables cosas para hacer, conocer y recorrer; es un destino donde todo lo que vas a hacer lo hagas de manera frenética. Va a depender de los gustos personales, pero aquí van algunas sugerencias de cosas o situaciones que no son atractivos turísticos en sí mismos, pero que si ayudan a entender la cotidianeidad japonesa y la enorme diferencia cultural que existe con lo que conocemos en occidente. Experiencias que quizás no son tan obvias, pero que considero absolutamente necesarias si tenés la suerte de viajar a Japón.
1- Explorar el mundo subterráneo
Japón posee un territorio pequeño para tanta cantidad de habitantes. Por ello es que en paralelo a las ciudades en la superficie, existen ciudades gigantescas por debajo, pasillos llenos de negocios, restaurantes, supermercados, tiendas de Uniqlo, y lo que se te ocurra, en el mundo subterráneo. Otro detalle muy interesante además del hecho de que podés caminar por horas y recorrer íntegramente las ciudades por debajo, es que en muchas partes, estos Malls subterráneos llegan a cuatro pisos por debajo de las superficie, sin sensación de claustrofobia. Realmente increíble.
2- Probar las exóticas delicias (o no tan delicias)
Anko, dulce de porotos rojos japonés.[/caption]
La gastronomía Japonesa es peculiar, diferente a todo. Con ingredientes diferentes y combinaciones de sabores impensadas, la cocina nipona, y sobre todo su pastelería y repostería, merecen ser probadas. Pueden no gustar, pero tenés que intentarlo. Los sabores típicos incluyen el ANKO o dulce de porotos rojos, el té verde, el Matchá (una versión mas elevada y costosa del té verde), masas a base de arroz, Tofu, fideos de arroz, o el Senbei, una galleta de arroz salada que se sirve incluso envuelta en alga nori: una extraña delicia, más si se la acompaña con una exótica y deliciosa bebida, como la SKAL, que no es otra cosa que una gaseosa en base a leche descremada. Si sos temerario, Japón es el país para vos.
Bebida Gaseosa Japonesa a Base de Leche Descremada.
Desayuno Japonés de Degustación en el Morinoyado Inn, Miyajima, Hiroshima.[/caption]
De todas maneras, tengo bien claro cual es mi favorito: el Momjii Manjuu, una especie de bizcochuelo cocinado al vapor con forma de hoja de arce, que puede estar relleno con dulce de porotos rojos, crema pastelera, matchá o chocolate, que literalmente se sienten como una nube en la boca. También unos extraños snacks dulces de alga nori con semillas que saben muy bien. Ah, y es casi obligatorio probar la maravillosa cocina callejera en Japón. Muy sabrosa y a precios accesibles. En este contexto, no olvidar visitar el Mercado de Pescado de Tokio, sobre el cual me explayo más en el post de la capital nipona.
Momjii Manjuu, dulce otoñal típico de Hiroshima.[/caption]
3- Ceremonia del Té
Matchá y masa a base de manteca en Ceremonia del Té en Templo Kinkaku-ji, Kyoto.
Las ceremonias o ritos son parte fundamental de la vida en Japón, y las ceremonia del Té es una de ellas. Nosotros fuimos a dos en Japón, ambas en Kyoto, y una en Seúl, en Corea del Sur. Las de Kyoto las tuvimos en el parque del templo Kinkaku-ji, la Pagoda Dorada, y la segunda en el Kyomizu Dera. El té es Matchá, delicioso a mi gusto, y siempre lo acompañan con alguna masa especial. El hecho de descalzarse, sentarse en el suelo, disfrutar de la ceremonia y tomar el té en un silencio casi mágico apreciando la maravilla del paisajismo Japonés vale la experiencia.
4- Viajar en Tren Bala
Tren Shinkansen que conecta las ciudades de Kyoto y Osaka.
Japón es el pionero de los trenes rápidos y posee una red de trenes maravillosos que comunican al país en apenas horas. La perfección, sincronización, limpieza y modernidad de los trenes como así de las estaciones ferroviarias Japonesas son una atracción en sí mismas. Explico la importancia de comprar el JR Pass para aprovechar esta extensa ruta ferroviaria en este post. Pero no solo los viajes en sí son hermosos para vivenciar, sino que también visitar las magníficas estaciones fque son auténticas ciudades, tal el caso de las estaciones de Tokio y Kyoto, constituyen imprescindibles a la hora de recorrer Japón.
5- Onsen o Baños públicos
Interior del Onsen Jakotsuyu en Asakusa, Tokyo.
Los Onsen son baños públicos de aguas a diferentes temperaturas (en general de pasás de sentir que te están hirviendo como una rana a otra de agua demasiado caliente y eventualmente una pileta de agua helada). Es muy ritual, de silencio, y muy tradicional entre los japoneses. Pero héte aquí un problema que son los tatuajes. Son pocos los onsen que aceptan personas con tatuajes en sus instalaciones. Los tatuajes son para los japoneses símbolos de la Yakuza, la famosa mafia japonesa, por lo cual están muy mal vistos. En todo caso, si tenés tatuaje pequeño, se pueden tapar con unos stickers color piel (vienen en distintas tonalidades) que se adhieren a la piel y listo. Ahora si tenés tatuajes grandes o varios tatuajes, en Tokio hay un muy buen Onsen en Asakusa llamado Jakotsuyu donde eso no es un tema y se puede disfrutar de esta hermosa experiencia. Más detalles sobre ello brindaré en un futuro post.
6- Dormir en un Ryokan (Alojamiento Tradicional)
El Ryokan es la experiencia más japonesa tradicional a la hora de vivir y dormir. Tenés alojamientos totalmente tradicionales, pero si no te convence la idea de una experiencia total, muchos hoteles poseen ambas posibilidades de habitaciones, occidental o Ryokan, en el marco de un alojamiento más conocido a uno. En nuestro caso lo hicimos en el Morinoyado Inn de la isla santuario de Miyajima, en un hotel donde además degustamos una cena y desayuno japoneses de sabores únicos, que personalmente me gustaron muchísimo. Contrario a lo que pensaba, los Tatami donde dormimos resultaron ser extremadamente cómodos y es una experiencia que jamás voy a poder olvidar. A favor de esta modalidad, es que muchas veces el Ryokan en un alojamiento tradicional es notoriamente más barato que un hotel tradicional.
7- Conocer (¿y jugar?) en un Pachinko
El Pachinko es un juego que en algún punto se parece a un tragamonedas, a un flpper y a un juego Arcade. Es una obsesión japonesa que mueve más de 20 mil millones de dólares al año. Se trata de un juego importado de Chicago en 1920 y que tras la segunda guerra mundial ganó en popularidad. El jugar por dinero (al igual que la prostitución), es ilegal en Japón, pero hecha la ley, hecha la trampa. En caso de ganar dinero, se cobra en otro edificio a través de un voucher que luego se cambia por yenes, o bien, si no vas a un local enorme de Pachinko, te vas a otros establecimientos, donde en vez de cambiarlo por dinero, las ganancias se canjean por productos. Se juegan con pelotitas de metal y el valor de cada una, dependiendo el local, va de 1 a 4 yenes (la cotización del Yen es de aproximadamente 100 yens = 1 USD). De todas maneras, mas allá de jugar, lo llamativo es el ambiente, extremadamente ruidoso, lleno de luces y de gente a cualquier hora del día.
8- Entrar a los Negocios de Electrónica (y sorprenderse con los artefactos más bizarros)
Las grandes tiendas de electrodomésticos en Japón venden mucho más que eso. Por ejemplo, Yodobashi es una tienda gigantesca que vende absolutamente de todo: desde comestibles, pasando por todo lo necesario para tu maqueta de trenes a escala, juguetes hasta todo lo que se te ocurra para tu Cámara de Fotos y los electrodomésticos señalado. Vas a encontrar secadores de vajilla con la forma de un secador común, asientos de inodoro inteligentes, centrifugadores de verduras que parecen secarropas y arroceras de todo color, tipo y precio. Un universo inimaginable de productos para quienes vivimos del otro lado del mundo.
Cómo lo he dicho en otros posts, Tokio es fascinante y enorme. Una idea de ello es que en la ciudad viven 13 millones de habitantes, y contando el Gran Tokio, la cifra sube hasta 35 millones. Es una ciudad rica en historia, diversidad de lugares y experiencias, por lo cual paso a compartir con vos mi experiencia personal de lo que pudimos hacer en la maravillosa capital nipona.
¿Qué hacer en Tokio?
Uff, la pregunta sería qué no hacer. Hay demasiadas cosas para hacer o visitar, por lo cual la primer recomendación es no sentirse mal si no llegás a hacer esto o aquello. Es ciertamente imposible. Por lo que tenés que disfrutar lo que vos elijas hacer en el abanico de infinitas posibilidades que brinda esta ciudad. Cómo sugerencia, te recomiendo quizás agrupar los destinos por cercanía: podés hacer Shinjuku y Shibuya en un mismo día, lo mismo que el Centro de Tokyo y Ginza; a estos cuatro barrios los podés intercambiar pues se encuentran muy cerca entre ellos y les podés agregar Minato para visitar la Tokyo Tower. Otro itinerario es Asakusa y Sumida para visitar la Tokyo Skytree, y Ueno y Akihabara, por sus cercanías. Todo es relativo y se adapta a los gustos de cada uno, Eso sí, como para hacer hay muchísimo, les doy una sintética idea de lo que nosotros pudimos conocer en nuestros días en Tokio, en los barrios que llegamos a recorrer:
Esquina en Shinjuku, TokioCalles de Shinjuku, Tokio
SHINJUKU
Caminar por sus callejuelas y pasear por el hermoso parque Gyoen Mae. Admirar como al lado de un edificio ultramoderno de 40 pisos hay un viejo local de Ramen de una planta; observar esa transición que todavía se da en ciertos lugares de Shinjuku. Admirar además las gigantescas pantallas led en las calles con motivos de Animé o Manga, y caminar por las calles de Kabukicho, la zona roja de Shinjuku.
Cruzando la calle en Shibuya, Tokio.
SHIBUYA
Cruzar por el cruce de calles más famoso del mundo y perderse entre la marea de gente que inunda sus calles, con muchos adolescentes y no tanto con sus disfraces de Cosplay; y por supuesto, sacarse la foto con Hachiko, una de las estatuas de perros mas famosas y fotografiadas del mundo.
Mercado del Pescado de Tsukiji, Tokio.Mercado del Pescado Tsukiji, Tokio.Palacio Imperial, tokyo.
CENTRO DE TOKIO
El mercado de pescado Tsukiji, el más grande del mundo, en donde podrás probar los sabores más exquisitos y extraños que se te ocurran; el Palacio Imperial de Tokio y la espectacular estación central de Tokio con su infinita variedad comercial y gastronómica. En esta estación recomiendo fuertemente buscar el local de Tokyo Milk Cheese Factory, fabricantes de unas galletas con relleno de Camembert y Sal, y Gorgonzola y Miel, que no tienen desperdicio.
Vista desde la Tokyo Tower, Tokio.
MINATO
El principal y casi único atractivo de este barrio es la Tokyo Tower, una especie de Torre Eiffel más pequeña con colores naranja y blanco que brinda una vista espectacular de Tokyo. La Tokyo Tower posee dos miradores: el principal que se encuentra a 150 metros de altura, y otro que se halla a 250 metros. Para acceder solo al primer deck el costo es de 900 yenes (unos 8 USD), mientras el ticket combo para ir a ambas plataformas cuesta 2800 yenes (unos 24 USD).
GINZA
Caminar por uno de los barrios más elegantes y caros de Tokyo, admirar la arquitectura, entrar a sus tiendas de lujo, visitar el Uniqlo más grande del mundo con sus 11 pisos y experimentar su extraordinario movimiento a toda hora del día.
Templo Sensoji, Asakusa, Tokio.Galleta Senbei de arroz envuelta en alga nori.
ASAKUSA
Es el barrio más tradicional de Tokio. La prioridad es visitar el templo Sensoji, mundialmente famoso por su gigantesco farol en la entrada. Entre la entrada y el templo se encuentra un mercado, muy útil para comprar souvenirs y disfrutar de otros sabores, como el Senbei, una galleta de arroz crocante que puede ser dulce o salada. En mi caso, probé ambas pero me gustó mucho una que viene envuelta en alga nori y que se “dipea(?)” en salsa de soja. Deliciosa. Además, en Asakusa se encuentra uno de los pocos Onsen (baños públicos japoneses) que aceptan personas con tatuajes.
Tokyo Skytree, Sumida, Tokio.Tokyo Skytree, Sumida, Tokio
SUMIDA
Desde Asakusa se puede caminar hacia Sumida (también podés llegar en tren a la Estación de Trenes que se encuentra en el mismo edificio), donde se halla la Tokyo SkyTree, una torre de 634 metros de alto (la más alta del mundo) con un mirador a una altura de 450 metros. Las vistas son extraordinarias y bien vale la pena la visita. La torre cuenta en realidad con dos miradores: el de 350 metros y el de 450 metros. El ingreso a la misma cuesta 2060 yenes (unos 18 USD aproximadamente) hasta los 350 metros, y un extra de 1030 yenes (unos 9 USD) para subir hasta los 450 metros. Existe una opción de Fast Pass, que cuesta 4000 yenes (unos 35 USD) por ambas experiencias. Las vistas bien valen la pena el desembolso.
Pagoda en el Zoológico de Ueno, Ueno Park, Tokio.Ueno Park, Ueno, Tokio
UENO
Lo principal es el Ueno Park, un parque hermoso y muy grande para recorrer con calma. En el mismo se halla el zoológico mas antiguo de Japón, se pueden visitar museos y pagodas. Asimismo, vale la pena recorrer la zona de restaurantes Izayaka-Machi, con gran variedad de opciones gastronómicas, y recorrer a lo largo el Ueno Ameyoko, un mercado al aire libre con todo tipo de ítems, que te lleva hacia Akiahabara.
Mercado de Ameyoko, Ueno, que desemboca en el barrio de Akihabara.
AKIHABARA
Recomiendo hacer Ueno y Akihabara el mismo día puesto que se puede a caminar de un barrio a otro a través del Mercado de Ameyoko, que constituye en sí mismo una paseo muy agradable. En Akihabara se pueden encontrar las famosas tiendas de electrónica sin impuestos, cafés temáticos, negocios para los más grandes fanáticos del manga y animé y es el paraíso de las máquinas surtidoras de los ítems más insólitos. Es uno de los barrios más famosos históricamente de Japón, por lo que constituiría una picardía no visitarlo.
Una de las cosas que más llama la atención cuando nos movemos en Tokio es su maraña de líneas de metros y trenes que se superponen. Algunos repiten recorridos pero son de distintas empresas, entonces tenés que saber cual usar. Ese es un problema si decidís moverte con la JR Pass y la Yamanote Line, tal lo planteado en este post . Pero no lo es si decidís no validar el pase y decidís trasladarte usando las dos tarjetas monedero de la capital Nipona: SUICA y PASMO.
¿CUÁL ES MEJOR?
Las tarjetas SUICA y PASMO, en el el pasado fueron tarjetas independientes una de la otra pero hoy en día son compatibles: donde se usa una, se puede usar la otra. SUICA es de Japan Rail y PASMO pertenece a Keihin y Keisei. El uso en Tokio es amplio e idéntico entre ambas tarjetas. Quizás la única ventaja que pueda tener SUICA sobre PASMO es que la primera puede tener mayor uso en el resto del país, pues puede ser usada, aunque solo para las lineas JR de otros lugares de Japón como Nagoya, Kioto, Hiroshima, Osaka y Fukuoka, entre otros. En cambio PASMO es de uso casi nulo en el resto del país. Aun así, va a depender de tu itinerario y necesidades.
¿DÓNDE COMPRARLAS?
Oficina de JR East, dónde se puede comprar o devolver la tarjeta SUICA.
Para comprarlas sólo hay que ir a las oficinas de JR East en las estaciones de Japan Rail (SUICA) o a las oficinas de las otras compañías, como el caso de Keihin y Keisei (PASMO). En el caso de SUICA y PASMO se pueden comprar desembolsando desde 1000 Yenes, 500 en concepto de depósito de garantía y 500 en crédito. También se venden tarjetas de 2 mil, 3 mil y 4 mil yenes, siempre descontando los 500 yenes de depósito.
¿CÓMO USARLAS?
Para recargar las tarjetas, hay muchísimas máquinas en todas las estaciones de metro o trenes de Tokio. Es un sistema no muy diferente al de la recarga de las SUBE en máquinas. Afortunadamente existe la opción de hacer recarga en inglés. Cabe remarcar que solo se puede hacer la recarga en dinero de un mínimo de 1000 yenes, y no hay posibilidad alguna de recargar con la tarjeta de crédito o débito.
El pago de los viajes es igual que al de muchas tarjetas de su tipo, por simple contacto. La diferencia es que en Japón no se cobra cuando ingresamos a tomar el primer metro, sino cuando abandonamos la estación de destino. El sistema procesa los datos y te cobra el monto total en ese momento. Como ya lo he dicho en otro post, los viajes van entre 150 y 300 yenes dependiendo la línea que tomaste y los trasbordos. No es barato pero funciona de lujo.
DEVOLUCIÓN DE LAS TARJETAS
Oficina de la Línea Keisei en el Aeropuerto de Narita, dónde se puede comprar o devolver la tarjeta PASMO.
En el caso de ambas tarjetas, se pueden recuperar los 500 yenes del depósito a la hora de regresar a casa, devolviendo la SUICA en alguna de las oficinas de JR East, o la PASMO, en las oficinas de las líneas Keihin o Keisei, o en las oficinas de ambos aeropuertos, Haneda o Narita.
IMPORTANTE: La devolución solo se puede realizar en el área de Tokio. Si vas a salir desde otro Aeropuerto de Japón, tramitá la devolución antes de salir de Tokio. Por otra parte, la devolución no es completa en el caso de la SUICA: si bien se devuelven los 500 yenes del depósito, sobre el saldo restante, si es que lo hubiere, se restan 220 yenes de comisión. Es decir, que si tu saldo es menor a 220 yenes, sólo te devolverán los 500 yenes del depósito.
TARJETAS MONEDERO
Un beneficio interesante de ambas tarjetas es que funcionan como monedero, ya que su saldo se puede utilizar también para pagar consumos de las máquinas expendedoras, tiendas y restaurantes. ¿Cómo saber si aceptan SUICA o PASMO para pagar? Con PASMO sólo podrás utilizarla si en el cartel especifican que la aceptan, pero en el caso de SUICA, cuando veas que aceptan otras tarjetas regionales terminadas en A, como ICOCA, TOICA o SUGOCA, significa que aceptan SUICA también.
SI LA PERDÉS…
No te desesperes. Para prevenir una situación cómo esta, lo más recomendable sería que anotes o le saques una foto al número que aparece en la esquina inferior derecha del reverso de la tarjeta. Si llegases a perder la tarjeta, vas a cualquier oficina donde se pueda comprar una SUICA o PASMO, y con ese número dan de baja esa tarjeta y te dan una de reemplazo con el mismo crédito de la anterior. Este reemplazo cuesta 1010 yenes: 510 en concepto de renovación y los 500 yenes de depósito, por lo que si tu saldo es bajo, quizás ni valga la pena hacerlo.
CONCLUSIÓN
En mi caso personal compré la SUICA porque fue la primera que hallé, pero habida cuenta su mayor rango de uso, recomendaría comprar la SUICA si es que te vas a mover por el país. En cambio, si te quedás en Tokio, cualquiera de las dos son iguales. Asimismo, por más que tengas el JR Pass, el mismo cubre solo trenes, en cambio toda la red de metros es privada y exige de una de estas tarjetas. Por ende, es un muy buen complemento para tu JR Pass. Asimismo, al ser una tarjeta monedero es una gran manera de no cargar tanto efectivo consigo, en un país en el que todavía existe mucha costumbre de pagar con dinero físico.