No hay dudas que Amsterdam Schiphol es uno de los aeropuertos más importantes y de mayor tránsito del mundo. Es enorme, con muchísimas comodidades y con una gran cantidad de lounges, de los cuales solo dos son accesibles con Priority Pass o Mastercard Lounge Key: Aspire Lounge Nº 26 (para vuelos en zona Schengen) y Aspire Lounge Nº 41 (para vuelos fuera de zona Schengen). En este caso me referiré al Nº 26, en ocasión de una escala en Amsterdam antes de tomar mi vuelo a Helsinki.
Cómo Llegar


El Aspire Lounge Nº 26 se encuentra en la Terminal 1, en la zona de Embarque. Tras los controles de seguridad solo hay que girar a la derecha a la derecha y seguir las indicaciones hacia el Lounge 26. Cabe remarcar que los pasajeros que salen de la puerta M no pueden ingresar al Vip. Son tantos los Lounges en Schiphol que están enumerados. Para mayor ayuda, fijarse en los mapas adjuntos.

El Lounge

Se trata de un lounge muy grande pero también muy concurrido. Difícilmente lo hallemos vacío. Tiene numerosos asientos, pero aún así llegar y encontrar uno vacante por momentos es cuestión de suerte.


El Aspire Lounge Nº 26 está abierto de 5:30 a 21 horas y la estadía permitida es de 3 horas. Cuenta con un Wi Fi que en mi caso no funcionó muy bien, gran variedad de publicaciones para leer que se pueden retirar en la entrada del Lounge, y sectores con conexión ethernet para conectar las laptops y trabajar. El Lounge no cuenta con servicio de duchas (ese servicio solo se encuentra en el Nª 41), solo baños regulares. Asimismo, cuentan con un personal numeroso que constantemente están limpiando y levantando platos y vasos, lo que hace, que a pesar de estar siempre muy concurrido, esté constantemente limpio.

Para Comer y Beber
El Aspire Lounge 26 tiene una variedad gastronómica acotada y no posee servicios de comidas calientes. Muchos quesos, fiambres, variedad de panadería y galletas, snacks, cereales y sopas en sobres. Asimismo, cuentan con variedad de mermeladas y siropes, y la posibilidad de hacerse waffles uno mismo.



Pero lo que falta para comer sobra para beber, ya que hay una gran variedad de bebidas alcohólicas y no alcohólicas para servirse. Lo mismo con las bebidas calientes. Es todo autoservicio.

Cómo se puede observar en la foto de abajo, la variedad de bebidas es amplia y como es de esperarse, cuentan con la posibilidad de servirse cerveza Heineken tirada. Al fin y al cabo, estamos en una de las capitales de la cerveza.

Como curiosidad, entre los vinos disponibles, hallé un vino bivarietal Chardonnay Torrontés Salteño.

Conclusión:
Es un lounge que cumple con lo necesario, que es brindar un lugar de silencio y comodidad dentro del barullo de un aeropuerto tan ajetreado. Los servicios son justos y necesarios para pasar unas horas y consumir algunos snacks y sobre todo bebidas. Si tenés Priority Pass o Mastercard Loungekey ilimitada, es una buena opción; en cambio si tus ingresos son limitados es cuestión de evaluar si vas a necesitar esos ingresos en otros viajes, sobre todo en un aeropuerto tan fascinante como Schiphol. Aun así es una buena opción si tenés esperas largas, y siempre el ahorro de consumos en el Lounge suma y mucho en tiempos de cambio desfavorable.